Comprender las tecnologías detrás de la Web3

Objetivos de aprendizaje

Después de completar esta unidad, podrá:

Describir los principales componentes de la Web3.
Definir los NFT, la tecnología de cadenas de bloques y las criptomonedas.

Las partes integrantes de la Web3: Cadena de bloques

En el mundo digital actual, una persona puede comprar un tuit, desarrollar un terreno digital, pagar sin una moneda tradicional y rastrear una cantidad significativa de datos, todo esto desde la comodidad de su dispositivo personal. Lo que permite esta transparencia es la innovadora tecnología de cadenas de bloques.

Una cadena de bloques es un sistema de registro de información en un libro de cuentas digital a prueba de manipulaciones distribuido por toda su red de sistemas informáticos. Cada bloque de la cadena contiene datos de transacciones que registran cada una de ellas en los libros de cuentas de los participantes. Las transacciones son públicas y, una vez publicadas, no se pueden modificar, manipular o borrar.

La idea de una cadena de bloques surgió como una solución para obtener marcas de fecha precisas y fijas, similares a las de un notario. Este aspecto fundamental sigue presente en la tecnología actual.

La cadena de bloques es un tipo de tecnología de libro de cuentas distribuido (distributed ledger technology, DLT), donde estas transacciones son programables, inalterables y anónimas.

Las cadenas de bloques crecen de manera constante a medida que se agregan bloques (transacciones que registran información verificada) a la cadena a través de cada transacción. Esto aumenta la seguridad de todo el libro de cuentas. Cuantos más bloques haya en la cadena, más seguro será todo el sistema. Esto también permite a los reguladores identificar fácilmente si se manipuló alguno de los bloques, lo que hace casi imposible los hackeos.

Se trata de un sector joven, en el que todavía se desarrollan normas y estándares, que incluyen cuestiones clave como la sostenibilidad. Las compañías, incluida Salesforce, tienen la oportunidad de liderar con valores y desarrollar normas y puntos de referencia positivos para utilizar la tecnología de los NFT y de la cadena de bloques de forma sostenible.

Un desafío clave en este espacio se relaciona con la sostenibilidad. Muchas de las criptomonedas de primera generación (como Bitcoin) se basan en cadenas de bloques de prueba de trabajo (PoW), que requieren el uso de energía (es decir, trabajo) para realizar transacciones. Esto generó un importante consumo de energía y emisiones de carbono, ya que Bitcoin consume tanta energía al año como el país de Tailandia (en febrero de 2022), según Digiconomist.

El sector sigue abordando los problemas de sostenibilidad a medida que evoluciona su tecnología, como notamos con las nuevas y próximas cadenas de bloques de prueba de participación (PoS). Según los modelos actuales, se cree que las cadenas de bloques de PoS reducen de manera significativa el consumo de energía en comparación con las cadenas de bloques de PoW (hasta en un 99,95 %, según el libro de Olga Kharif Bye-Bye, Miners! How Ethereum's Big Change Will Work, que se publicó en Bloomberg.com en 2021). Además, los residuos electrónicos del uso de la cadena de bloques de PoW pueden eliminarse al cambiar a PoS, que no depende de un hardware físico para proteger la red.

Las compañías y organizaciones que exploran las aplicaciones de cadena de bloques deben desarrollar estrategias claras de sostenibilidad para cuantificar, minimizar, neutralizar y divulgar los impactos ambientales a fin de dar lugar a cero emisiones, al tiempo que deben impulsar una mayor sostenibilidad en el sector en general.

Ahora que hemos hablado sobre el poder, la finalidad y el impacto de la Web3, veamos cómo se utiliza esta tecnología en las criptomonedas.

¿Qué hace que una moneda sea una criptomoneda?

La respuesta sencilla es que una criptomoneda es una moneda digital no tradicional que se crea sobre la cadena de bloques. Para desarrollar esto, veamos cómo surgieron las criptomonedas.

El 31 de octubre de 2008, Satoshi Nakamoto envió un documento a un grupo de criptógrafos familiarizados con la tecnología de cadenas de bloques en el que describía una nueva forma de "dinero electrónico" llamada Bitcoin. En este documento, detalló cómo la tecnología de libro de cuentas distribuido (DLT) se combinó con varias otras tecnologías y conceptos para crear las criptomonedas actuales. Estas monedas digitales son esencialmente dinero electrónico protegido mediante mecanismos criptográficos en lugar de una autoridad central como un banco, una compañía o un gobierno.

La tecnología de bloques de cadenas es la base de las criptomonedas modernas, más conocidas como cripto. Su nombre se debe al uso intensivo de funciones criptográficas junto con los libros de cuentas descentralizados.

Este sistema permite a alguien comprar, realizar negocios y poseer una variedad de elementos, incluidos los NFT y bienes inmuebles. Con una mayor integración en nuestro sistema financiero, podemos esperar muchas más aplicaciones.

A continuación, vamos a explorar la función de los NFT en el ecosistema de la Web3.

¿Qué es un NFT?

Un token no fungible (NFT) es un activo digital que representa objetos digitales o físicos, como arte, música, entradas para eventos, videos, etc. Están respaldados por contratos inteligentes, lo que les permite tener propiedades distintivas como ventas secundarias y valor transferible.

Así es como funcionan los NFT.

Los NFT existen en una cadena de bloques, que es un libro de cuentas distribuido público que registra las transacciones.
Los NFT son independientes de la cadena de bloques, lo que significa que pueden crearse en diversas cadenas de bloques.
Un NFT se crea, o se "acuña", a partir de objetos digitales que pueden representar tanto elementos tangibles como intangibles.
Un NFT solo puede tener un propietario a la vez, y los datos únicos de un NFT facilitan la verificación del creador y del propietario, y permiten la transferencia de tokens entre propietarios.
El creador escribe un contrato inteligente que define el uso y los derechos del NFT.

El valor de los NFT

Entonces, ¿por qué comprar un NFT si cualquiera puede copiar una imagen o un video mediante una búsqueda en Internet y unos pocos clics? Comprar un NFT proporciona una prueba de propiedad de un activo digital único, que puede incluir bienes virtuales, elementos de juegos, arte digital, etc. Al crearse en la cadena de bloques, el historial de transacciones y de propiedad es público. Esta información se valida y registra la autenticidad del vendedor y la propiedad única. Al igual que con un activo físico, se puede recopilar, intercambiar o vender. En el caso del arte digital o al comprar un NFT en mercados secundarios, los compradores deben seguir las mejores prácticas para evitar posibles estafas y otros riesgos. (Esto se abordará con más detalle en una unidad posterior).

Esta tecnología permite la confianza y la transparencia entre el comprador y el vendedor al tener acceso completo a las transacciones históricas. La transparencia que ofrecen los registros públicos le permite al comprador conocer el historial de transacciones del vendedor. A medida que esta tecnología se desarrolle, veremos a las compañías crear productos que verificarán a un vendedor o proporcionarán una calificación de riesgo basada en interacciones digitales pasadas.

Cualquier persona puede buscar en Internet una imagen, un video o un NFT, y descargarlo en un dispositivo. Pero esto significa solo guardar una copia del archivo, no obtener los derechos de propiedad digital. Por ejemplo, hay muchas copias del cuadro La noche estrellada de Van Gogh, pero solo hay un cuadro original de La noche estrellada. En teoría, los NFT ofrecen a los coleccionistas la posibilidad de poseer los derechos digitales de una obra de arte, de forma similar a la posesión del original de La noche estrellada. (Nota: Esto no incluye a los creadores que copian y vuelven a publicar la obra del artista original como propia. Estos artistas violan los derechos de autor y pueden enfrentarse a graves penalizaciones).

Se están desarrollando nuevas experiencias en torno a bienes digitales y físicos poco comunes mediante el uso de los NFT. Dado que cualquier elemento digital puede ser un NFT, hay varios casos de uso posibles. Algunas compañías ya han aprovechado esta idea, al lanzar un sistema de NFT para verificar la autenticidad de las zapatillas, o al crear un NFT a partir de videoclips de momentos deportivos importantes para que los aficionados puedan apropiarse de las mejores jugadas.

Para demostrar la utilidad de los NFT, proporcionamos otros casos de uso. Es posible que veamos más casos con el paso del tiempo y los avances tecnológicos.

Activo de juego: Los NFT se pueden utilizar como personajes en los videojuegos y poseer capacidades de ludificación. Por ejemplo, los juegos han permitido a los jugadores comprar NFT que sirven como sus avatares del juego. A medida que los jugadores juegan, pueden ganar más NFT, como un escudo muy raro para ayudarlos en la batalla o un nuevo accesorio para desarrollar su avatar.
Clave: Los NFT pueden servir de clave para desbloquear contenido, como una suscripción a una revista deportiva o de noticias. Solo los titulares del NFT pueden acceder a los artículos, las actualizaciones y las estadísticas de la publicación.
Gemelo digital: Los NFT pueden ser exclusivamente digitales. Sin embargo, algunos proyectos han permitido la creación de gemelos digitales. Por ejemplo, ofrecer ropa virtual que se pueda usar en el metaverso o enviar un objeto físico idéntico a los propietarios del NFT.
Propiedad intelectual: Los proyectos pueden permitir a los miembros poseer la propiedad intelectual de su NFT. El propietario no tiene que pedirle al creador del NFT que utilice su avatar: puede crear todo un negocio en torno al NFT.
Gobernanza/voto: Los NFT pueden otorgar a los propietarios derechos de voto sobre los próximos productos promocionales y los lanzamientos de nuevas plataformas o productos, entre otras cosas.

Los NFT pueden crear autenticidad, establecer valor, democratizar el acceso a los mercados globales y construir una comunidad. Analicemos en profundidad cómo los NFT utilizan los contratos inteligentes y las billeteras.

Contratos inteligentes y billeteras

¿Cómo se puede utilizar la criptomoneda para comprar un NFT? Comencemos por entender cómo se rastrean estas transacciones con los contratos inteligentes y cómo los usuarios emplean las billeteras para comprar y conservar sus NFT.

En primer lugar, repasemos algunos términos relacionados con los NFT.

Contratos inteligentes: Se trata de programas informáticos (unas pocas líneas de código), almacenados en una cadena de bloques, que se ejecutan cuando se cumplen ciertas condiciones predeterminadas. Se pueden considerar como una aplicación de la Web3. Suelen utilizarse para automatizar la ejecución de un acuerdo (o contrato), de modo que todos los participantes puedan estar seguros del resultado de manera inmediata, sin la participación de intermediarios ni pérdidas de tiempo. También pueden automatizar un flujo de trabajo, al desencadenar la siguiente acción, cuando se cumplen ciertas condiciones.

Billeteras: Una billetera es una aplicación, o complemento, que permite a los usuarios acceder/recuperar, enviar y recibir activos digitales. Cuando un usuario adquiere una criptomoneda, como Bitcoin o Ethereum, puede almacenarla en una billetera y desde allí utilizarla para realizar transacciones. Existen dos tipos de billeteras.

Una billetera con custodia: alguien que no es el verdadero propietario crea y protege la billetera. Por ejemplo, una cuenta creada en Coinbase.
Una billetera sin custodia: los consumidores crean, poseen y gestionan su billetera. A menudo permanecen directamente en los navegadores (en caliente) o en dispositivos sin conexión (almacenamiento en frío). Son los usuarios quienes autogestionan la seguridad.

Los contratos inteligentes se utilizan para proteger a los compradores y vendedores con contratos automatizados que están programados para ejecutarse cuando se cumplen ciertas condiciones. Estos contratos no se pueden modificar o disputar una vez ejecutados porque son inalterables, distribuidos y públicos.

Al poder rastrear cuándo y a quién se venden todos los NFT, los contratos inteligentes hacen posible la compra de NFT a escala. Esto crea muchas posibilidades, como permitir los derechos de autor para el creador original de un NFT y ofrecer protección a los compradores.

Para adquirir un NFT, el comprador necesita una billetera. Hay muchos tipos de billeteras, tanto con custodia como sin custodia, cada una con sus ventajas y desventajas. Metamask, por ejemplo, es una billetera sin custodia, basada en el navegador, que actualmente es la más popular para usar con OpenSea, un mercado de NFT en tendencia. Con el aumento de la popularidad de los NFT y los mercados, los compradores deberían analizar qué billetera se adapta mejor a sus necesidades en cuanto a seguridad, facilidad de uso y compatibilidad con el mercado de su elección.

Las billeteras permiten nuevas posibilidades de interacción entre marcas y usuarios. Algunas posibilidades son las siguientes:

Nueva identidad: Los usuarios pueden conectarse a un sitio y luego proporcionar acceso a cualquier información relevante que quieran compartir con la compañía para su personalización. Esto proporciona una clave para acceder a los datos, en lugar de compartirlos.
Nuevas experiencias: En un futuro próximo, los usuarios podrán tener una amplia gama de activos en sus billeteras y crear sus versiones virtuales. Estas representaciones en 3D les permitirán probarse la ropa en tiempo real y ver cómo les queda en su versión virtual.
Nuevas formas de iniciar sesión: En el futuro, los usuarios podrán utilizar los NFT en los sitios web en lugar de las contraseñas. Guardados en billeteras, los NFT permitirán el acceso sin necesidad de recordar contraseñas o tener información personal almacenada en la red de una marca.

Ahora que has aprendido sobre bloque de cadenas, criptografía y NFT, abordemos cómo todas estas tecnologías pueden unirse en el metaverso para crear experiencias digitales distintas que son posibles gracias al compromiso y la participación de la comunidad Web3 en evolución.